Así es queridos, la vida consta de miles "Volver a empezar" por poco que nos guste.
Y por poco que guste, a los 30, volver a empezar es bastante más difícil que con un puñado de años menos.
Yo, personalmente, he tenido la suerte de poder contar con mis amigos y familia... pero luego, realmente el camino lo haces sola. Sola, no porque no se interese tu entorno por ti, porque quien más o quien menos tiene su vida encauzada... Te das cuenta de que tus amigos se han casado o tienen niños o ambas, que han emigrado para buscarse la vida o simplemente tienen sus prioridades ya establecidas y no encajas en esos planes,
Si queridos, el camino te espera por delante y no tienes ni idea de que hacer. Pero te armas de valor, haces de tripa corazón y llenas tus maletas de música, películas y todo aquello que te gusta para intentar disfrutar en soledad y de forma independiente.
Cuando realmente aprendes a gestionar esa independencia es cuando estás preparada para empezar a buscarte los algarrobos, o los maromos o los amantes bandidos. Pero admitamos, que a determinada edad ya es más difícil conocer gente nueva. Los gimnasios están llenos de músculos de poco cultivo neuronal, los bares de niños con peor piel que mi primo " El mayor " y las discotecas... ¡Ay queridos! Las discotecas... esa gran desconocida que aún tengo que explorar... Aunque voy a pasar por alto a los artistas, modernos y nuevos locos del runner porque de estos hablaré cuando me sienta realmente preparada.
Y, las páginas de contactos... Esas páginas que te venden humo puro y duro, casi todas llenas de "hombres" aparentemente maduros, con las ideas claras y los pasos firmes, que en realidad tienen más miedo que tú y han hecho suya la capacidad de histeriquear cual mujer hormonando...
Así que como me va a dar para mil funciones más os deseo feliz lunes y hasta el siguiente post!